Fue noticia hace alrededor de un año y esta semana sale a la calle, y es que este producto finalmente saldrá de los laboratorios para llegar al consumidor a través de un restaurante de Madrid que ha licenciado la fórmula para utilizarla en la masa de pan, bollería, pizzas, etc. ¿Qué tiene de especial?
Este producto a sido desarrollado por Cristina-Molina Rosell y Concha Collar, junto con su equipo de investigación, en el centro donde trabajo, el Instituto de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos.
Que no engorda…bueno como veis es una triquiñuela usada en periodismo, es claramente sensacionalista, porque todos los alimentos engordan. Pero podríamos decir que este pan engorda casi la mitad que un pan normal de los que podamos ir a comprar en cualquier restaurante, bueno, pan y cualquier producto elaborado con esta masa.
La masa además de incluir harina de trigo incluye harinas de otros vegetales, ricas en fibra, con lo cual se consigue un pan igual de esponjoso, con buen sabor, pero al fin de cuentas con un 45% menos de calorías.
De momento deduzco que este pan será distribuido de forma exclusiva en dicho restaurante durante un tiempo pero que poco a poco irá extendiéndose para que esté en las estanterías de todos los supermercados.
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