Seguro que en más de una ocasión habréis oído hablar de las famosas mantecas de karité o incluso tendréis alguna crema en casa con este ingrediente, prometiendo una excepcional hidratación para la piel, si quereis conocer algunas curiosidades de este ingrediente, no dudéis en seguir leyendo.
Vitellaria paradoxa es el nombre científico que recibe el karité (que significa árbol de mantequilla), perteneciente a la división Magnoliophyta. Puede alcanzar los 15 metros de altura y el metro de diámetro y vivir hasta 300 años siendo propio de la sabana del oeste africano (Burkina Faso, Costa de Marfil, Sudán y Mali). Se ha visto que da sus primeros frutos a los 15 años, alcanzando la edad adulta a los 30, una vez alcanzada la madurez del árbol, es capaz de proporcionar unos 20 kg de frutos, de los cuales se obtienen 5 kg de almendras secas (de las cuales se obtiene aproximadamente 1 kg de manteca de karité). Sin embargo, es entre los 50 y 100 años cuando alcanza su mayor esplendor, proporcionando una mayor cantidad de frutos, no es por tanto un cultivo del que sacar beneficios a corto plazo.
Los frutos que produce, en botánica reciben el nombre de drupas, al igual que los albaricoques, las cerezas, las aceitunas, los melocotones… que comparten una estructura similar, mesocarpio carnoso, coriáceo o fibroso, rodeando un endocarpio leñoso y que alberga una semilla en su interior, es decir, se trata de frutos más o menos carnosos que rodean un hueso más duro y en cuyo interior hay una semilla o almendra.
En África, llaman a estos frutos nueces, dado que su tamaño es el equivalente y la recogida de los mismos y la fabricación de la mantequilla de karité es una actividad que da trabajo a muchas mujeres. El proceso de fabricación comienza con la recolecta y el lavado de las almendras, a continuación se triturarán y tostarán y se pasarán por una especie de molinillo del cual se saca una pasta de un tono marrón bastante líquida. Con el batido a mano se consigue separar la mantequilla del resto de los componentes. Una vez recuperada la mantequilla o grasa vegetal, se lleva a ebullición, se filtra con la intención de separar las impurezas que han quedado de todo el proceso y finalmente se obtiene el producto de un tono más claro.
Se trata de una sustancia comestible, que emplean como mantequilla en la cocina propia de la región como condimento y para la elaboración de salsas, además, también para fabricar chocolate sustituyendo esta manteca por la de cacao. Sin embargo, si por algo destaca es por la hidratación que produce, es por ello por lo que se emplea hoy en día en la industria cosmética. Para los cosméticos sin embargo, se obtiene la manteca presionando en frío la almendra, obteniendo un producto más blanquecino.
Finalmente destacar que el karité contiene también una pequeña cantidad de latex natural, no idéntico al latex que produce el árbol de caucho, pero su composición química es bastante parecida, de modo que aquellos que seais alérgicos al látex debéis ir con cuidado con los productos que contengan karité.
Os dejo un video de Burkina, donde se explica mejor el comercio y se ve el proceso de elaboración en lagunas de sus fases.
No hay comentarios :
Publicar un comentario