La comunicación facial y corporal

 

En la naturaleza encontramos frecuentemente individuos que se agrupan formando asociaciones intraespecíficas (entre individuos de una misma especie) o en algunos casos interespecíficas (entre organismos de especies diferentes). La expresión facial y la postura que adopta el cuerpo, son elementos básicos en la comunicación del mundo animal. Tanto es así que una parte de la etología se dedica a estudiar desde hace muchos años las distintas expresiones faciales de los organismos y lo que implica cada postura. ¿Queréis saber más?

La expresión facial es un medio importantísimo en la comunicación entre los lobos, es más, su comportamiento forma parte de los roles de dominancia y sumisión que puede adoptar un individuo dentro de una manada, ya que en una confrontación sería fundamental poder distinguir al individuo dominante. Este siempre intentará parecer más grande y poderoso adoptando una postura erguida y con las orejas y la cola erectas con tal fin. Al igual que los perros, son capaces de erizar los pelillos del cuello y del lomo aparentando agresividad. En la postura contraria encontraremos el individuo sumiso, mostrándose más pequeño e imitando a una cría batiendo la cola entre las piernas. Puede incluso rodar patas arriba mostrando su barriga convirtiéndose en un ser totalmente vulnerable.

 

Los movimientos de la cola son también muy útiles a la hora de conocer estados de ánimo. El batido de la cola de un lado hacia el otro puede indicar alegría, el rabo entre las piernas indica miedo y cuando tienen la cola erguida podrían estar expresando enfado. En las siguientes imágenes tenéis algunas posiciones y lo que indicarían en el caso de lobos (aplicable también a perros) y en el caso de gatos, considerados menos expresivos que los perros.

Las orejas son otro elemento importante, si se encuentran estiradas el individuo permanecería en alerta, si las mantiene hacia detrás todo lo contrario, placer, sumisión o incluso miedo. La boca y la mirada van unidas a la expresión de las orejas. La mirada es fundamental en los roles de dominancia-sumisión, sólo una mirada podría hacer que el adversario se retirara en el caso de ser incapaz de sostenerla.

Estos estudios se han realizado con infinidad de organismos, gansos, peces, insectos… permitiendo analizar su comportamiento de alarma, ataque, defensa, cortejo…

Una vez más, los humanos no somos menos, también hay toda una serie de estudios que intentan descifrar a través de las posturas qué tipo de personas somos, sin embargo, la pregunta para nosotros siempre es si la cultura influye en nuestras expresiones y en nuestros modos de actuar.